EL ANALISTA ES UN ARTESANO DE LA PALABRA Y DE LA TRANSFERENCIA

EDICIONES TRIBURGO, BARCELONA, 2014. (64 páginas).
Este pequeño volumen es la transcripción de una entrevista que me hizo Magne Fernandez-Marban, en Noviembre de 2013, para la Librería Xoroi y la Casa de la Paraula, ambas de Barcelona. La entrevista no tuvo un carácter formal; se trató más bien de una conversación cordial, amistosa: un ir y venir de preguntas y respuestas en que las primeras no esperaban contestaciones certeras sino, simplemente, comentarios con los que relanzar el díálogo; las puntualizaciones que yo iba haciendo iban despertando, a su turno, nuevos interrogantes.
El título que con posterioridad le otorgué a la versión escrita de lo dicho en ese encuentro vino a especificar algo que expresé hace ya muchos años sobre el ejercicio del psicoanálisis: se trata de un oficio; el “oficio del analista”: una de las pocas tareas artesanales que persiste en la era post-industrial.
En el transcurso de dicha entrevista sostuve que el psicoanálisis estaba en crisis y señalé las posibles causas de la misma. Manifesté asimismo la urgente necesidad de transformar el psicoanálisis -tanto a nivel clínico com teórico- para hacerlo operativo en las circunstancias sociales y culturales de hoy en día. Para ello debería declararse caducos algunos de sus conceptos, renovar otros e inventar nuevos; también, modificar las modalidades de intervención del analista para hacerlas más acordes a los nuevos desafíos que la clínica contemporánea propone. Claro está sin que esto suponga recortarlo o rebajarlo en aquello que le es esencial: el manejo de la transferencia, el abordaje de lo inconsciente, del narcisismo, de la repetición y de la organización pulsional del sujeto.
En conexión directa con estas ideas avancé una propuesta audaz: iniciar y llevar a cabo la formación de nuevas generaciones de analistas en el seno de talleres clínicos dirigidos por psicoanalistas avezados, encargados de aportar materiales de analizantes y supervisar los casos que presenten quienes están en formación. Propuse asimismo que el acercamiento a la teoría se realice con punto de partida en las problemáticas que se vayan detectando en las sesiones presentadas. En fin: “un retorno a la clínica”, no sólo para potenciar los logros terapéuticos del psicoanálisis sino y también para descubrir y conceptualizar las formas contemporáneas de la subjetividad humana.